Conservación y cuidado de los alimentos


Seguramente siempre has ordenado, limpiado y realizado las tareas domésticas con tu mayor esmero, pero a partir de la llegada de tu bebe a la casa deberás volcar en dichas actividades mayor esfuerzo.


Cómo tratar los alimentos y evitar las infecciones

Para empezar debes tener en cuenta que tu bebé posee un sistema inmunológico muy poco desarrollado y es por ello que sus alimentos juegan un rol fundamental para prevenir enfermedades.
Las bacterias son organismos vivos, poseen un gran poder de adaptación y se encuentran ampliamente distribuidas en la naturaleza, las encontramos en el aire, en la tierra, en el suelo y en los alimentos.

Existe un grupo de bacterias llamadas PATÓGENAS, que producen daños a la salud y las conocidas enfermedades transmitidas por alimentos (ETA); las cuales son peligrosas porque no nos damos cuenta de su existencia ya que no alteran el estado del alimento en forma evidente.
 
Conservación de los alimentos
Es muy importante respetar el orden y almacenamiento de los alimentos. Para ello debemos clasificarlos en dos grandes grupos:

  • Alimentos perecederos: como los vegetales, las carnes los productos lácteos y todos aquellos que se ofrecen en estado fresco y deben consumirse rápidamente debido a la brevedad de su tiempo de conservación. A todo este grupo NUNCA le debes cortar la cadena de frío.
  • Alimentos no perecederos: como las lentejas, el arroz, las harinas, las conservas, el azúcar, la leche en polvo, que son productos generalmente secos o con algún tratamiento de conservación especial, lo que impide su alteración y permite un almacenamiento sin frío, en lugares sin humedad y preferentemente oscuros.

Temperaturas de conservación
A temperaturas muy frías, de 5ºC para abajo, como por ejemplo en una heladera, un congelador o un freezer, es muy difícil que se reproduzcan los microorganismos, pero tampoco se mueren sino que en su mayoría se inmovilizan.
A temperatura ambiente, sobretodo en la franja que comprende desde los 5ºC a los 65ºC, es la zona más peligrosa para la contaminación ya que a los microorganismos más peligrosos les gusta crecer en este rango.
A temperaturas superiores a los 65ºC, es decir al calentar o cocinar un alimento, es cuando comienzan a morir los microorganismos.

Tanto sean los alimentos caseros o industrializados debemos tener en cuenta su conservación. Es recomendable saber como debe ser la disposición de los alimentos en una heladera, en una alacena o en el freezer.

En la heladera
Una vez realizada la compra de los alimentos perecederos debes proceder a su almacenamiento en el plazo de tiempo más corto posible para no cortar su cadena de frío.
Primero debes tener en cuenta que la heladera esté funcionando correctamente, es decir que tenga la temperatura adecuada, lo ideal sería que oscile entre los 4 y 6ºC; luego debes verificar que las gomas o burletes de la puerta no estén resecos o dañados lo que provocaría una pérdida importante de frío.
También debes evitar abrirla incontables veces ya que eso también genera un aumento de la temperatura interior y por último no debes sobrecargar los estantes y cajones ya que dificulta la circulación de aire frío.

Cuando cocines una papilla, un caldo, un puré y lo quieras conservar en la heladera debes esperar que se enfríe antes de guardarlo. Como regla de oro considera que NUNCA deberás guardar en la heladera alimentos que superen la temperatura ambiente (20ºC) ya que el agua de condensación que aparece en los alimentos calientes cuando se guardan en lugares fríos pueden provocar cambios en la textura de los mismos y ser la causa de contaminaciones.
Para lograr una buena distribución de los alimentos y “evitar así una contaminación cruzada” (es la que ocurre entre los alimentos crudos y los listos para ser consumidos) además es conveniente separar los alimentos del bebé de aquellos que consumen los mayores.

Reglas para organizar un refrigerador
Existen reglas generales de cómo uno debe organizar un refrigerador para disminuir al máximo las contaminaciones:

  • Tener todos los alimentos y preparaciones protegidas, en recipientes con tapas, bolsas o cerrados con film.
  • Nunca guardar un alimento crudo por encima de uno cocido o precocido ya que éstos últimos pueden ser consumidos sin ningún tratamiento térmico y pueden haber sufrido contaminaciones.
  • Nunca guardar carne por encima de vegetales ni frutas ya que estos también suelen consumirse crudos.
  • Guardar los huevos en lugares con protección o bien lo más abajo posible para evitar que caiga la suciedad de la cáscara sobre el resto de los alimentos.
  • Nunca lavar los huevos antes de guardarlos en la heladera ya que la cáscara pierde la protección natural que posee tornándose permeable y quedando más susceptible a las contaminaciones.
  • Mantener los lácteos separados y bien cerrados ya que son propensos a absorber los aromas de la heladera y son fáciles de enranciar por el alto contenido graso y proteico que poseen.
  • Las mamaderas y tetinas  es recomendable que siempre estén bien lavadas y en lo posible esterilizadas. Es conveniente ubicarlos dentro de un recipiente con tapa para evitar posibles contaminaciones.
  • La comida ya preparada de tu bebé debe estar etiquetada con fecha de elaboración, y separada del resto de los alimentos.

En el freezer

  • Es importante guardar los alimentos bien cerrados para evitar daños en su textura, no deben entrar en contacto con el hielo porque se quemarían.
  • Siempre que guardes algo en el freezer no olvides de indicar que producto es y cual es la fecha de almacenamiento, esto te ayudará a mantener una correcta rotación de mercadería dentro del freezer y así evitarás cometer errores o desperdiciar comida por vencimientos.

En la alacena

  • En la alacena se guardan los alimentos no perecederos, para mejorar su conservación es conveniente que dicho lugar no se encuentre por encima de la heladera o del horno ya que son zonas más calurosas. La temperatura ideal de almacenamiento de dichos alimentos es la ambiente, cercana a los 20ºC, con poca luz y una humedad relativa.
  • Para seguir un orden debes separar los alimentos dulces de los salados y si compras muchas preparaciones tipo papillas o purés te conviene mantenerlos siempre bajo un mismo orden, de esta forma te será sencillo mantener un stock de mercadería y una clasificación adecuada.
 

Crecer Juntos® acompaña a los papás y las mamás en la compleja tarea de ser padres, sin pretender bajo ningún concepto reemplazar la figura del pediatra o médico de la familia.