La hora del baño


Se aconseja comenzarlo después de tres días de la caída del cordón, en general por la noche, para permitirle un descanso más relajado. A esa hora tu esposo ya estará en casa y podrá ayudarte a disfrutar ese momento.

Cuando llegue la hora de bañarlo, procura que el cuarto de baño se encuentre a una temperatura adecuada. Prepara de antemano los utensilios necesarios: el jabón debe ser preferentemente de glicerina, no perfumado, sin desodorantes, para no dañar la piel del bebé. La ropa debe ser siempre limpia. Sobre la piel del bebé debe colocarse ropa de color blanco. De esta forma evitarás intoxicaciones por pigmentos o anilinas.

El agua deberá tener una temperatura de 35 a 36 grados centígrados. Si no tienes un termómetro esto es fácil de resolver: sumerge tu codo en el baño; enfríalo hasta que no te cause disconfor.

Durante los primeros baños tendrás que tener el máximo cuidado. Hazlo con la mayor dulzura. Sujeta a tu bebé firmemente: con una mano la cabeza y con la otra el tronco. Introdúcelo lentamente para evitar que se asuste. Verás como de esta forma se adaptará bien a este momento, que será de alegría y mucho afecto.

Limpieza de los ojos
No es necesario realizar ningún tipo de limpieza en especial, el movimiento de los párpados sirve para que las lágrimas actúen como baño ocular.

Limpieza de la nariz
El estornudo es el mecanismo que permite al bebé liberarse de las molestias que le ocasionan las secreciones y mucosidades. Por lo tanto no es necesario realizar una higiene minuciosa. Cuando tu bebé estornude recuerda esto y no pienses que se ha resfriado.

Limpieza de las orejas
Higieniza solamente la parte externa del pabellón y no utilices hisopos en el conducto. Estos pueden producir lastimaduras. La cera sirve para proteger el conducto auditivo y ayuda a mantenerlo limpio.

Limpieza de la boca
No es necesario practicar ningún cuidado especial, salvo cuando aparecen manchas blancas en su interior, denominadas "muguet". Estas son producidas por un hongo que se adhiere a la lengua, el paladar y las encías. Consulta a tu pediatra, quien orientará su tratamiento.

Limpieza de las uñas: Ver nota

Limpieza de los genitales: Ver nota

 

 

Crecer Juntos® acompaña a los papás y las mamás en la compleja tarea de ser padres, sin pretender bajo ningún concepto reemplazar la figura del pediatra o médico de la familia.