Chicos: Genitales externos y vello


La evaluación de la maduración sexual del sexo masculino se basa en la observación del desarrollo de los caracteres sexuales secundarios (genitales externos, vello púbico, axilar y facial, y cambio de la voz) del desarrollo testicular y de la eyaculación.

El desarrollo de los genitales externos y del vello púbico puede determinarse por observación comparativa con los estadios de Tanner.

Genitales externos

  • Estadio G1: pene, testículo y escroto de tamaño infantil.
  • Estadio G2: aumento del tamaño de los testículos y el escroto (por lo general, el pene no aumenta). Piel del escroto más fina y enrojecida.
  • Estadio G3: continuación del aumento del tamaño de los testículos y del escroto. Aumenta principalmente la longitud del pene
  • Estadio G4: continuación del crecimiento de los testículos y del escroto. Aumenta la longitud y el diámetro del pene. Pigmentación de la piel del escroto.
  • Estadio G5: órganos genitales propios de una persona adulta, tanto por su tamaño como por su forma

Vello púbico

  • Estadio P1: no hay vello púbico.
  • Estadio P2: crecimiento disperso de vello largo, fino, ligeramente pigmentado, liso o ligeramente rizado en la base del pene.
  • Estadio P3: vello más pigmentado, más denso, más rizado que se extiende por la sínfisis púbica.
  • Estadio P4: vello del tipo observado en una persona adulta, pero en menor cantidad.
  • Estadio P5: vello del tipo observado en una persona adulta, tanto por su tipo como por su cantidad.

La manifestación de pubertad en el sexo masculino es el crecimiento de los testículos como resultado del desarrollo de los conductos seminíferos. El aumento del volumen testicular va seguido de la aparición del vello púbico y del crecimiento del pene.
El crecimiento del vello axilar ocurre generalmente dos años después de que aparece el vello púbico y va seguido de la aparición de vello facial y luego de la del resto del cuerpo.

El crecimiento testicular pasa por un importante período de aceleración y puede medirse de modo más objetivo por medio de palpación comparativa con el orquidímetro de Prader, que consiste en un conjunto de modelos elipsoides de volumen conocido; es posible encontrar volúmenes de 1, 2 y a veces 3 ml antes de la pubertad. Un volumen de 4 ml o más indica que la pubertad ya comenzó y los superiores a 12 ml pueden considerarse como adultos.
El vello axilar y facial aparece después del vello púbico. Los cambios de voz surgen generalmente en la fase avanzada del crecimiento genital. Todas las estructuras de la reproducción (próstata, vesículas seminales, etc.) muestran un crecimiento acentuado en la adolescencia a partir del comienzo del desarrollo testicular. La edad de la primera eyaculación es bastante variable y corresponde generalmente con una fase avanzada de maduración.
En lo que respecta al aumento de estatura, se observa que al iniciarse el desarrollo genital (G2), el adolescente mantiene una velocidad constante de crecimiento (5 a 6 cm y 2 a 3 Kg por año).

La fase de aceleración del crecimiento comienza cerca de un año después, cuando el adolescente se encuentra en el estadio G3. La velocidad máxima de crecimiento coincide con frecuencia con el estadio G4 y va seguida de una desaceleración gradual en el G5.
Vale la pena recordar que ciertas modificaciones fisiológicas (aumento de la tensión arterial, reducción de la frecuencia cardíaca, etc.) y otras de orden bioquímico (aumento de la fosfatasa alcalina y de la hemoglobina en el sexo masculino, etc.) a menudo guardan mayor relación con la fase del crecimiento y la maduración sexual que con la edad cronológica.

Se debe destacar que los adolescentes cuyo proceso de maduración se inicia más tarde que el promedio de la población presentarán también un atraso en lo que respecta a estatura, peso y otras variables del desarrollo puberal. En el caso de los adolescentes que maduran más pronto que el promedio de la población, todos los cambios puberales ocurrirían antes y se produciría un fenotipo adulto de menor estatura que la del promedio de la población. Esas situaciones de desarrollo en que la aparición de las características puberales se adelanta o se atrasa pueden ser normales y guardan relación con características familiares y, por lo tanto, son motivos de preocupación y ansiedad para los adolescentes que continuamente se comparan con los pares de la misma edad.
Además de la consideración de los factores genéticos que pueden determinar diversos aspectos del desarrollo físico, no se puede dejar de señalar las influencias del ambiente y, en particular, del estado nutricional en el proceso de crecimiento y desarrollo del adolescente.

 



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