Algunos niños aceptan con resignación
el hecho de volver al ciclo lectivo. Sin embargo,
la gran mayoría espera con ansias comenzar
las clases y reencontrarse con sus compañeritos
pero a todos les cuesta dejar la rutina de vacaciones
para comenzar el año.
La pereza del verano
tiene que dar paso a los horarios, los deberes
y la disciplina. Se debe realizar una transición
lenta y gradual.
Todos
a dormir
Suele ocurrir que los chicos durante el período
de vacaciones se acuesten a una hora más
tardía de lo habitual. Es importante reacostumbrarlos
al nuevo horario. Los niños entre 5 y 8
años necesitan descansar alrededor de 12
horas diarias. Cumplir diariamente con los horarios
de sueño
es fundamental para que los chicos descansen lo
suficiente, se levanten a horario y rindan en
clase.
Cada
uno con sus obligaciones
Es importante que a medida que se vaya acercando
el período de actividad escolar comiencen
a estructurar sus días. Una buena alternativa
es ir presentándoles y proponiéndoles
actividades que van a realizar en clase combinadas
con aquellas propias de las vacaciones.
Placard
nuevo
Es importante que los chicos tengan la ropa adecuada:
suficientes remeras y pantalones, zapatos cómodos
y sencillos de abrochar, camperas fáciles
de abrir, etc. Es importante que ellos mismos,
en la medida de lo posible, elijan la ropa que
quieren llevar. De esta manera, se podrán
evitar las batallas diarias y ellos sentirán
que tienen cierta libertad. Por otra parte, no
conviene comprar toda la ropa para el colegio
por adelantado ya que es probable que sepas con
certeza cuales son sus necesidades una vez que
hayan comenzado las clases.
Pediatra
Es conveniente realizarles un chequeo general
antes de comenzar las clases, ya sea para saber
si están las vacunas
completas, como para verificar una consulta de
rutina con el dentista
o una revisión ocular. Esto te permitirá
estar tranquila y evitar los trastornos de los
primeros días de clases.
La
seño
Conocer a la maestra con anterioridad ayuda a
reducir la ansiedad de los chicos. De ser posible,
significa una gran posibilidad para que los chicos
se adapten y puedan conocer a su maestra e ir
familiarizándose con ella.
La
locura de la mañana
Un buen despertar es el mejor de los comienzos.
Una opción de gran ayuda es dejar la ropa
que los chicos se van a poner para ir al colegio
ordenada y lista. De esta forma se evitarán
demoras y los chicos podrán vestirse solos.
También se puede dejar lista la mesa del
desayuno,
preparada para servirlo y evitar retrasos.
El
desayuno
Es muy importante que tengan un muy buen desayuno
que combine proteínas y carbohidratos para
obtener energía y concentración
de larga duración. Es importante esta comida
ya que una vez que comience las clases no tendrá
más la oportunidad de abrir la heladera
cada vez que tenga hambre.
El
recreo
Si es necesario se les puede dar para que se lleven
al colegio una fruta, un alfajor o una barra de
cereal para aliviar el hambre hasta el mediodía.
Los
juguetes
No es buena idea que los chicos se lleven sus
juguetes
preferidos al colegio ya que se pueden extraviar,
arruinar y hasta en algunos casos causar envidia
y peleas entre los compañeros. Conviene
asignar un lugar determinado en la casa para que
cuando los chicos vuelvan del colegio puedan ubicarlos
con facilidad y jugar con ellos.
La
mochila
También es importante que los papás
revisen diariamente las mochilas de los chicos.
Generalmente las maestras ponen en sus mochilas
notificaciones importantes o listas de materiales
entre otras cosas, a las cuales debemos estar
atentos para que los chicos no concurran al colegio
sin sus materiales.
Lugar
para los deberes
Generalmente los chicos eligen hacer sus deberes
en lugares concurridos y físicamente cerca
de sus padres. Estos lugares pueden ser la cocina
y el comedor entre otros. No está mal que
ellos hagan sus deberes en estos lugares. Sin
embargo, los niños más grandes deberían
tener su lugar propio, con mesa y espacio para
sus útiles.
Con respecto a la concentración, es importante
que cada niño encuentre su estilo y ámbito
de estudio, no todos se concentran de la misma
manera, algunos pueden deben hacerlo en silencio,
mientras que otros prefieren un poco de música.
Es primordial que exista un proceso de ensayo
y error antes de dar con el mejor ambiente.
Actividades
extracurriculares
Es importante tener en cuenta que antes de agregar
actividades extracurriculares a nuestros hijos
debemos estar al tanto del grado de exigencia
que tienen en el colegio. Una vez que seamos concientes
de eso y consideremos que pueden realizar más
actividades podemos incorporarlos. Es más
sencillo este proceso que el inverso en donde
los llenamos de actividades y luego debemos retirarlos
ya que es demasiado para ellos.
La
vuelta al cole
Debemos ayudar a nuestros hijos a que se relajen
cada día cuando vuelven del colegio, especialmente
durante las primeras semanas y trasmitirle que
el primer día de clase es motivo de festejo
y no de duelo por el fin de las vacaciones. Podemos
hacerle un desayuno
especial, unas fotos mañaneras o una cena
especial y de esta manera comenzar con buen pie
el nuevo año.
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